Una mirada expresiva

Este es un asunto más de las cosas que me llaman la atención de la vida de todos los días, de nuestro mundo, un mundo ordinario, o extraordinario, según se vea.

Nos lo tomemos como nos lo tomemos, somos simios. Pertenecemos a una ilustre familia de la que sobreviven 4 géneros (humanos, chimpacés, gorilas, gibones) y unas cuantas especies más o menos peludas. En todas ellas es muy importante el sentido de la vista, y la comunicación a través de gestos faciales; tenemos caras verticales, ojos situados al frente, etc, un buen número de características comunes.



Un bonito par de gorilas (Gorilla gorilla), adulto y cachorro.
Son notables los amplios orificios nasales y los ojos expresivos, incluso en el macho adulto, a pesar del fuerte arco supraorbital.




Este es un precioso chimpacé (Pan troglodytes, por cierto que me pregunto a qué se debe lo de troglodytes, seguro que el apelativo tiene un origen muy curioso), que también muestra una gran expresividad en la mirada.


Y en esta mujer (Homo sapiens, aunque sea un poco arrogante lo de sapiens) se ve una vez más la importancia de la mirada para el gesto.



Algo que me resulta muy llamativo es la diferencia en proporción de iris/esclerótica (visible) en los ojos de los humanos y del resto de primates. Así en chimpacés, gorilas etc, el iris ocupa prácticamente todo el área visible del ojo mirando al frente, mientras que entre nosotros viene a ser sólo las dos terceras partes, el resto es "blanco del ojo", que corresponde a la esclerótica.

Si bien no tengo ni idea de si existe algún estudio sobre este asunto, a mi se me ocurren dos posibles hipótesis:

- "Mayor campo visual": En los humanos al ser el iris más pequeño proporcionalmente, se premitiría mayor ángulo de giro, sin necesidad de mover la cabeza, logrando un mayor campo visual. Lo cierto es que esto nos coloca como los más vagos de los simios a la hora de mover el cuello, lo cual parece estar muy conforme con la experiencia.

- "Mayor expresividad de la mirada": La segunda posibilidad, este mayor ángulo de giro del iris, da una mayor variabilidad de miradas, y permite más grados de intensidad en la comunicación visual. O sea, nos da una mirada más expresiva...
Se puede leer esta entrada más bien relajada escuchando esta magnífica canción de Durán Durán, cortesía de youtube: "Ordinary world".

Como siempre si se comunica problemas con la difusión de estos contenidos que están disponibles en internet, los retiro por respeto a la propiedad intelectual; sgae aquí no tienes nada que hacer. Las fotos que aparecen se pueden encontrar a través de creative commons, y del texto, soy totalmente culpable.
Un momento...¿no hay nada más que añadir sobre el tema?. Siempre se puede analizar un poco:

- Hipóteis 1, "Mayor campo visual".
Según la Wikipedia, la visión binocular es: "la capacidad que tiene un ser vivo de integrar las dos imágenes que está viendo en una sola por medio del cerebro" , y ver en tres dimensiones.

Y el campo visual es " el espacio que se tiene delante que el ojo puede percibir".Para el ser humano este campo visual se calcula en

- En horizontal: 100º a los extremos de visión y 60º en dirección a nuestra nariz.
- En vertical tenemos un campo visual de 60º hacia arriba y de 70º hacia abajo.
Pues bien, nuestro ojo derecho tendrá un campo visual individual y el izquierdo otro, que tras el fenómeno de la visión binocular explicado, se formará un campo visual común a la visión de los dos ojos y un campo residual (hacia los extremos) quedará sin ver. (wiki dixit).

Ahora bien, para otra especie de visión frontal cuyos iris son proporcionalmente más grandes que los de los simios, el gato, el campo visual es muy semejante:
Esto no es de extrañar. En realidad el campo visual lo marca el ángulo de giro de la pupila, situada en el centro del iris, no el del iris en si, y por tanto es independiente de la proporción iris/esclerótica. Por tanto, descarto la primera hipótesis.

- Hipótesis 2, "Mayor expresividad de la mirada". Como se señala en este artículo de Paul Bouissac de la Universidad de Toronto, "The visual role of the sclera and the teeth in facial interactions" el primate humano ha evolucionado como un animal diurno que usa principalmente la vista para alimentarse, hallar refugio apropiado y parejas potenciales. En la interacción de los individuos adquieren gran importancia los gestos como forma de comunicación, y estos gestos se pueden realizar, con gran economía de movimientos y gran potencial comunicativo con la propia mirada. Al tener una proporción iris/esclerótica menor que otras especies, se permite mayor rango de movimiento del iris, con una variación de la cantidad de "blanco de ojo" visible mucho mayor; es decir se incrementa notablemente el potencial de comunicación no oral.
En el posible mecanismo evolutivo de esta peculiaridad humana no me quiero meter, pero sí me gustaría saber cuál era esta proporción iris/esclerótica en otras especies extintas del género homo. ¿Tendrían los neardenthales una mirada penetrante?. Buf, ¡qué curiosidad!