La tristeza me roza la piel, el tacto es estridente, metálico, me eriza, me hace temblar.
Tengo los ojos secos, me escuecen por su sequedad, siento la angustia pero no he podido llorar en todo este año.
Pero no quiero hablar de esto. ¿Para qué?. Y qué podría importar...¿me lo vas a contar?.

Durante un año completo he estado pintando un cuadro, tú sabes, ya había comenzado con él cuando supe de tu enfermedad. Es una imagen llena de colores cuya mezcla me fascina. Al poco de tu muerte, un día me vi ante el lienzo deslizando el pincel suavemente, embriagada por la suavidad del movimiento, por la fuerza de estos colores. Y entonces la idea del cuadro cambió, iba a hablar sobre ti y sobre mi, iba a hablar sobre la vida, sobre la muerte, iba a ser un encuentro, ibas a ser tú a ratos, a ratos asomaría yo.
Durante un año entero he estado retocando este lienzo, no lograba verlo terminado ni en realidad quería hacerlo, buscaba paz entre el torbellino de colores, buscaba plasmar la sorpresa que fue perderte.
Pero últimamente me angustiba más seguir con él porque el peso de la pérdida se impone a la serenidad que encuentro pintándolo, ya decidí terminarlo. No he terminado el diálogo contigo, siempre estará dentro de mi. Pero el cuadro...¿qué?, ¿la eternidad? me planteaba demasiadas preguntas. Lo dejo en eternidad, lo dejo así. Gracias por la vida. No quiero contar más aquí, sin embargo necesitaba desahogarme.
Y la orquesta tocaba https://soundcloud.com/whatsonot/what-so-not-touched.
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