El Felis maceticus catus, más conocido como gato macetero o gato de solana es una planta plurianual propia de terrenos cálidos y bien acolchados. Por ello, en los cortos días de invierno es preciso suministrarle una dosis adecuada de sol indirecto y ventilación moderada. Hay que estar pendiente, porque el tropismo de este cultivo por el sol, así como sus tendencias al sigilo, provocan con frecuencia el síndrome estresante del gato encerrado en el balcón, cuyos principales síntomas son un ataque de maullidos lastimeros y unas profusas huellas de patitas embarradas en la ventana. En general, el tratamiento de esta patología se reduce a abrir la puerta, proceder a una cura de mimos y un frotar enérgico de limpiador en la ventana. En los casos más graves es necesario proceder a medidas más taxativas, tales como administrar una dosis de caprichitos al minino y pintar la puerta.
Gracias por estos buenos consejos, porque en ocasiones he sabido qué hacer con este cultivo.
ResponderEliminarAh! se me olvidaba, creo que no tolera bien las pulverizaciones de agua, así que supongo que será mejor ponerla en el platillo ... o no. Espero que me indiques!!
Saluudos!
El cultivo de la foto, muy guapo! Con el ojo de un color que ya lo quisiera mi madre, dice.
NO he sabido qué hacer con el cultivo, (quería decir)
ResponderEliminarEfi, has redondeado la entrada. ¡Mira que no acordarme del importante y delicado asunto del riego!!. Regar siempre con mucho cuidado, procurando hidratar sin mojar, sobre todo si el gato pertenece a la variedad el-agua-ni-mentarla, que es la más común, je.
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