Pasa el tiempo y me doy cuenta de que en esto de los blogs soy realmente vieja. Siento un extraño vértigo en el estómago porque la mayor parte de los que leo son posteriores a este, vadebichos; y...es que esto de ver el tiempo que lleva una publicación circulando lo tengo tan asumido que normalmente suelo pensar en los bloggers como más viejos o jóvenes que yo no por la edad que podamos tener cada uno, sino por la fecha en que empezamos a escribir nuestros respectivos mamotretos. Que nadie se ofenda, si quisiéramos imprimir todo lo que escribimos en un blog saldría un mamotreto, posiblemente interesante pero seguramente muy grueso.
[Resulta que la expresión blogging blues se usa bastante a menudo, pero yo no la había oído nunca la primera vez que la usé, conste. La foto es de https://girlreading.net/2016/11/
Tiene su sentido, desde luego. Quien se ha lanzado a escribir sabe que se encuentra unas dificultades de partida, y otras muchas por el camino. Para mi la primera fue cómo escribir, y es que no tenía la costumbre de hacerlo. No es lo mismo hacer algún informe técnico que ponerse a contar cosas sobre animales, intentar hacerlo ameno y buscar el tono con que hacerlo...¿lo hago más amable?, ¿quiero ser más cortante o irónica, tal vez más perentoria?. Y la calidad de lo escrito, ah maldito intento de hacer un buen uso del lenguaje, yo que pensaba que sería mucho más sencillo...con cuántas piedras habré tropezado.
Tan difícil es para mi que me ocurre demasiado a menudo que si quiero contar algo lo tengo que hacer en un tono plano, neutro, porque a poco que me deje llevar por la mínima intención de calidad, me pierdo; sí, pierdo el hilo narrativo. Es bastante humillante, lo confieso, escribir es más difícil de lo que me había planteado.
Pero lo peor es la vergüenza. Me da pudor que me lean, no penseis que es porque me importe mucho la calidad de lo que escribo sino porque escribir es mostrar la mente, y temo enseñar demasiado, que se me vea mucho. Esto es algo que me ocurre en todos los niveles de la vida, y no pensaba que me fuera a ser tan limitante para escribir.
Pero no tengo tanto que temer, a mi me leen cuatro gatos y dos suspiros, y os ruego que me disculpeis si soleis leer este blog. Lo cierto es que lectores constantes tengo pocos, es por eso, además, que me permito escribir estas líneas. De ser de otra forma, si todas las entradas tuvieran el mismo nivel de lecturas, yo no iría contando estas cosas. Pero no, generalmente cuando escribo sobre alguna especie animal o algo que suscite cierta polémica (http://vadebichos.blogspot.com.es/2014/06/la-verdad-sobre-perros-y-lobos-el-perro.html, inciso, hoy en dia hay muchos más estudios que coinciden en que el animal del que surgió el perro no se pareció tanto a un lobo gris actual como le gustaría a los criadores de perros lobos) la cosa suele tener más repercusión.
Las reflexiones personales, por el contrario, tienen muy pocas lecturas. Y ya no digo cuando me pongo a analizar un tema más en profundidad, como los relativos a la falsa leyenda del gato del farero o los animales que menstrúan. Si fuera por las lecturas que reciben, no merecería la pena hacerlo, así que la mayor sastifacción que me dan este tipo de posts es que me obligan a hacerme mi propia idea sobre estos temas, después de haber hurgado mucho. Bueno, no hubo un gato del farero que extinguiera a una especie de pajarito él solito, y hay unas cuantas especies más aparte de la nuestra que menstrúan (usando el femenino como general), aunque eso no explica el sufrimiento que la menstruación le supone a miles, millones, de mujeres jóvenes o maduras.
Así que esto del lenguaje es un obstáculo importante para escribir un blog, pero conforme pasa el tiempo se hace más importante otro asunto, mantener el interés en seguir escribiéndolo, aparte de buscar el momento para hacerlo. En esto del interés se pasan por distintas fases, o sea no es un proceso lineal. Yo he echado de menos un interlocutor a lo largo de toda la historia de la existencia de este blog, y en determinados momentos esta ausencia me ha apartado totalmente del mismo; mientras que en otros la fuerza de lo que quería escribir, o investigar me mantenía activa por si misma. Pero el tiempo erosiona, sin duda, y exige más para estar aquí. Yo ya no puedo mantener la línea de un blog amable y apto para niños en todos los posts, porque me aburriría mortalmente esta falta de adrenalina en cada página. No quiero decir que no vaya a escribir contenidos para niños, ni que deje de escribir entradas para denunciar la extinción de especies y de las especies en extinción (http://vadebichos.blogspot.com.es/2015/04/el-nuevo-furtivismo-un-negocio.html, http://vadebichos.blogspot.com.es/2015/05/el-furtivismo-es-una-guerra-contra.html, http://vadebichos.blogspot.com.es/2014/01/y-si-tu-abrigo-de-pieles-le-han.html) , las numerosas crueldades contra los animales que se cometen en nombre de la cultura, el beneficio económico o la ignorancia pura y simple, y otras muchas cosas que creo importantes (http://vadebichos.blogspot.com.es/2014/06/blogging-blues.html#uds-search-results, http://vadebichos.blogspot.com.es/2013/12/por-que-es-interesante-esta-mariposa-me.html, http://vadebichos.blogspot.com.es/search/label/Invertebrados) , como muchas que me emocionan profundamente (http://vadebichos.blogspot.com.es/search/label/Delf%C3%ADn%20Marcos). No voy a dejar de hacer fotos a los animales que están cerca de nosotros y que tan a menudo no vemos porque nadie nos ha enseñado a hacerlo (http://vadebichos.blogspot.com.es/2012/11/ofiura-ofiura.html), ni a los cadáveres de animales que encuentre para enseñar, aprender y denunciar (http://vadebichos.blogspot.com.es/search/label/Ilustres%20cad%C3%A1veres). No tengo pensado dejar de hacer todo esto si sigo escribiendo el blog.
Quiero decir que en muchas otras ocasiones me desviaré por otros caminos, o, sencillamente, el blog no será. Además de soltar de tanto en tanto peroratas como esta.
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