martes, 29 de enero de 2013

Ciclogénesis explosiva (19-20/1/2013). Atendiendo a Marcos (IX)

Invierno en Almería.
Mucha gente piensa que son inviernos templados, al amparo de un mar en calma.

Pues no es totalmente cierto. Almería está en una esquina de la península, y la azotan tanto el Levante como el Poniente. Por aquí tenemos nuestra propia versión del invierno.

En este año han sido muy frecuentes los temporales de viento que pueden durar varios días seguidos. Cuando en cualquier otro lugar de Andalucía hace frío, en Almería hace...viento. Cuando se anuncian lluvias en Almería, lo más probable es que sólo haga viento, viento y más viento. Pero cuando lo que se anuncia es una ciclogénesis explosiva que recorre la península, en Almería lo que hace es un vendaval criminal.

El Mediterráneo, ese mar que tantos que no lo conocen bien describen como tranquilo y predecible, se riza en olas, pequeñas comparadas con otros mares pero mucho más continuadas; y se deshace en corrientes que fácilmente pueden arrastrar a una persona al fondo.
En la playa la arena agitada por el furor del viento golpea sin parar a quien se encuentre en medio de ese temporal. El viento te puede impedir avanzar y te puede hacer perder el equilibrio. Por momentos llega a ser un azote contra el cuerpo, contra la cara, contra los ojos, contra los oídos. El rugido del vendaval es lo único que se llega a oír en esos momentos.

Los voluntarios de Promar han tenido que soportar estas condiciones este fin de semana, a la vez que intentaban auxiliar a Marcos y preservar el campamento. 

Para que se entienda mejor la narración, hay que decir que el campamento en la playa está formado por una tienda de campaña de lonas acondicionada con un suelo de madera, ya que entra y sale gente con neoprenos mojados; una caseta de madera y varios elementos necesarios para vigilar a Marcos y a Lola. Lola suele estar en su propio recinto, una piscina dedicada a ella sola. Hay también una piscinita más grande para resguardar a Marcos de días de fuertes corrients u oleaje. Todas las noches hay gente pendiente de Marcos, haciéndole compañía o vigilándole desde el campamento.

Esto fue lo que ocurrió este fin de semana (19-20/1), de ciclogénesis explosiva:


Nota: Marcos lleva cinco (CINCO) meses bajo los cuiados de Promar. En este tiempo los gastos se han disparado, además de tener pérdidas de material por vendavales como el que aquí se relata. La necesidad de financiación y voluntarios para que Promar pueda ayudar a Marcos y a otros animales marinos es constante:
IMPORTANTE...............

Si deseas colaborar ponte en contacto con nosotros a estos teléfonos: 649.56.57.12 y 618.32.93.09 o al Email promarsosfaunamarina@nodo50.org

si quieres ir al campamento de la playa para ayudar con Marcos llama a este teléfono: 622.69.69.87

TU CONTRIBUCIÓN AYUDA A LA RECUPERACIÓN DEL DELFÍN "MARCOS"

PROMAR se financia exclusivamente de las cuotas de sus socios y cursos que realiza y no dispone de personal liberado ni contratado, todos, incluido personal del Equipo Veterinario y otros técnicos, son voluntarios.

Colabora y ayúdanos para financiar todos los gastos que estamos cubriendo para recuperar a “Marcos”.

NECESITAMOS TU COLABORACIÓN
Cajamar nº C/C.- 3058-0123-64-2720005367

PAYPAL
https://www.paypal.com/cgi-bin/webscr?cmd=_s-xclick&hosted_button_id=L68YFFWQ2J65S

DESDE FUERA DE ESPAÑA...NOT FROM SPAIN
BIC.- CCRIES2A
IBAN: ES94 3058 0123 6427 2000 5367

Aporta tu granito de arena para ayudar a delfines, ballenas y resto de especies marinas que se están viendo afectados por la actividad humana que pone en peligro la supervivencia de estos animales.

Queremos que veáis cómo nos azotó el temporal, pero también queremos que veáis que ni el peor de los temporales fue capaz de eliminar las sonrisas de nuestra gente, sonrisas que insuflaban energía a los que la necesitábamos,…
La noche del viernes al sábado con los fuertes vientos, todos conscientes de que cada segundo teníamos que estar alerta ante lo que podría suceder, siendo una noche de oleaje y con dos personas en el agua, siendo en ocasiones imposible ver a Marcos, la única forma era que desde tierra otra persona les fuese indicando con la linterna por donde estaba,…, fue un acierto untar de crema blanca la aleta dorsal de Marcos porque así era fácil verle en la oscuridad de la noche, funcionaba como un piloto que nos decía constantemente donde estaba. Así transcurrió la noche… mental y físicamente en alerta, amaneciendo todo bien.


Lo fuerte comenzó cuando el domingo al pasar el medio día partió la red con las fuertes olas, todo fue muy rápido, coger a Marcos y trasladarlo a la piscina, todos equipándose con el neopreno para controlar la red… siendo imposible, pero lo que nos importaba era que Marcos estaba bien en la piscina. A partir de aquí… fue la peor de nuestras batallas con la meteorología.



Con estas fotos podéis ver el trabajo que se estaba realizando para montar la piscina grande que al poco tiempo el viento destrozó, podéis observar cómo amaneció el campamento, el rastro que dejó el mar cuando lo inundó todo, parecía que nos quedaríamos sin arena y en medio del mar… el agua superaba el nivel del suelo de planchas que hay dentro de la carpa… había que correr para que el agua no tocará enchufes ni nada eléctrico, no daba tiempo a pensar solo actuar para poner a salvo lo importante y no quedarnos sin luz eléctrica, lo que nos hubiera empeorado mucho la situación.

Igualmente había que ir asegurando la carpa para que el viento no se la llevara, las piquetas al estar el suelo inundado se iban saliendo y había que ir fijando las cuerdas tensoras a los remolques, a cualquier lugar que pudiera darnos un punto de seguridad. Partió un tubo en una de las crucetas de la carpa, en uno de los puntos importantes, donde concuerdan tubos del techo, los verticales y horizontales, se realizó con cuerdas una pequeña reparación que por suerte funcionó. Además tuvimos que abrir las lonas de entrada de delante y atrás de la carpa para que el viento corriera y no revocara dentro y hacia arriba levantando la carpa. Tanto cuando se trabajaba en el agua como cuando se trabajaba en tierra, hubo momentos de peligro para las personas, pero todas ellas a una formamos una fuerte cadena para ayudarnos, superando miedos, frío y cansancio. No se paró hasta casi entrada la medianoche, compañeros trajeron de su casa ropa y zapatillas secas para aquellas personas que estaban con su ropa mojada, y ya casi sin fuerzas había que descansar un poco, aunque el viento no dejaba de soplar aterradoramente…
Al amanecer la mañana del domingo, con el tiempo calmado podemos ver las huellas que dejó, con las ruedas semienterradas en la arena del furgón y el otro vehículo, lo que por otro lado ayudó a fijarlos al suelo y que esta pared protegiera la piscina donde Marcos se encontraba, a pesar de ser la que estaba más expuesta a las olas. Todavía nos preguntamos cómo pudo ser la que menos sufriera del campamento… el Dios del Mar no desea daño para Marcos o Marcos tiene un ángel que le protege...






En esta foto podéis ver en el estado que quedó una farola del paseo marítimo, que partió el viento.




El paisaje que ofrecía el campamento con las primeras luces del sol no estimulaba precisamente el ánimo, pero ahí estaban, algunos compañeros y compañeras que se pusieron a limpiar y ordenar la carpa, el campamento, … y observar esa imagen… es indescriptible, en algunos nos supuso un subidón de moral impresionante… … a partir de ahí en poco tiempo el campamento estaba en las mejores condiciones, la carpa super-asegurada, todo limpio y ordenado, la ropa y zapatillas mojadas se llevaron a lavar y secar, había que preparar la comida y alimentarse bien, se trajo e instaló una nueva piscina de fibra, pequeña pero que aseguraba siempre para Marcos que tuviera una garantía por si la otra se estropeaba,… así que otra vez el ánimo recompuesto y todos seguíamos hacia delante.

El paso siguiente era mejorar las condiciones de Marcos cuando tuviéramos que sacarlo del mar, y ahí comenzaba otro reto, conseguir fondos económicos para la adquisición de una piscina grande de fibra, en el que él pudiera estar en óptimas condiciones y que el tiempo que ahí pasara no supusiera ningún retroceso en su evolución. Esperamos que pronto os la podamos mostrar en fotos, por lo que es indispensable vuestra ayuda para lograr el dinero necesario…  
Otra tarea que se nos ha presentado y es que al sacar la red del agua, hemos podido comprobar que estaba casi totalmente destrozada por lo que hoy mismo se ha iniciado las labores para elaborar una nueva red, con el “redero” que hasta ahora, en estos años y con Marcos, nos ha estado ayudando. Así volveremos a restablecer el cercado en el mar.
Se esperan vientos, de menos nivel que el de estos días, pero de todas formas hay que estar muy bien preparados y lo que tenemos claro, y es esencial, es que todas las personas que estamos aquí o en cualquier otra parte del mundo aunemos esfuerzos para que todo se vaya consiguiendo y logremos el objetivo de salvar a Marcos y devolverle al mar.
Acabar con un fuerte agradecimiento a los compañeros y compañeras que han sufrido el fuerte temporal, ellos y ellas han sacado a relucir sus mejores armas… su talante de lucha y apoyo al que tiene al lado y su linda y fresca sonrisa, el mejor y más limpio aire que se puede respirar

Este es el relato que hizo una de las voluntarias que sufrieron el vendaval del sábado por la tarde y tuvieron que ir corriendo al rescate de Marcos, de las redes, de la tienda, del tendido eléctrico...de todo:
(Del muro de facebook de la voluntaria, el domingo 20 de enero de 2013):



Ayer volví a nacer! Ayer valoré todos y cada uno de los pequeños detalles de las personas de mi alrededor!


Con estas lineas voy a intentar expresar de la mejor manera posible como transcurrió el “largo” dia de ayer en el campamento de Almerimar, no se si mis palabras conseguirán reflejar todo lo vivido pero al menos lo voy a intentar.
La noche del viernes me llamaron de Promar para ver si podía cubrir el turno de 11 a 13 de la tarde, a lo que dije que si. El dia me lo esperaba con viento y lluvia pero ni imaginar por un segundo lo que ocurriría.
Cuando llegué, la mar estaba picaiya y me dijeron que no entrase pues había sido una noche movida y Marquitos necesitaba reposo, que lo vigilase desde fuera.
Al cabo de un rato comenzó de nuevo el viento y la mar empezaba a revolverse más y más por lo que mi compañera Sandra y yo entramos dentro para evitar que Marcos sufriera de nuevo algún tipo de lesión.
Estuvimos un rato y cuando se tranquilizó el agua salimos dejándolo descansar pero siempre desde la mirada atenta de los compañeros que lo vigilaban desde las rocas.
Entramos dentro para calentarnos pues hacia bastante frio y nos quitamos los neoprenos dejándolos a la vista por si había que hacer de nuevo uso de ellos.
Estábamos tranquilos dentro de la carpa cuando de repente como si de una película se tratase alguien grito con todas sus fuerzas: LAS REDES SE HAN SOLTADO!!!!!!!!!!!!!
En cuestión de segundos todo era un caos! Rápidamente nos pusimos los neoprenos y sin poder ni pensar nos lanzamos al agua! Primero para sacar a Marcos  y llevarlo a una pequeña piscina provisional que había montada y luego para rescatar la red.
Marcos estaba agotado y en cuanto mi compañera Sandra se lanzó al agua a por él se le subió casi encima pidiéndonos ayuda! Pidiéndonos que lo sacásemos de allí!!!! No podía hablar pero su actitud lo reflejaba ya que no puso ningun tipo de resistencia al cogerlo (cuando la red estaba abierta y podría haber escapado perfectamente).
Fue increíble, un momento horrible pero a la vez muy emotivo de ver como Marcos reclamaba nuestra ayuda como si de un niño pequeño se tratase. No había palabras entre él y nosotros pero las miradas lo decían todo.
Marcos fue rescatado del agua por varias de las personas que allí estábamos y refugiado en la piscina, estaba muy nervioso pero las compañeras de PROMAR consiguieron estabilizarlo (ya que el estrés para un delfín no es nada bueno pues puede provocarle la muerte)
De inmediato que se le llevó a la piscina, un grupo de compañeros entramos en el agua a por la red que debido a la gran corriente se había soltado y situado bastante lejos del punto original.
Cuando se llegó al extremo de la red ya no dábamos pie y teníamos que estar luchando contra la fuerte corriente, las olas y el viento que llegó a alcanzar los 100 km/h mientras los demás compañeros hacían otra labor desde fuera (nada fácil) que consistía en atar el cabo de la red al vehículo para tirar de este y con nuestra ayuda desde dentro ir sacándola.
La cuerda que unía la red al coche se partió en cuatro ocasiones por lo que éramos incapaces desde dentro de controlar la situación debido insisto, a la fuerte corriente de la zona, por lo que uno de los compañeros viendo que se nos complicaba la cosa pidió que soltásemos la red y saliésemos del agua lo antes posible!

Personalmente hoy puedo contar estos gracias a mi compañera Sándra que rápidamente vino a por mi cuando le grite SOCORRO. Ya no podía nadar, la corriente era mas fuerte que yo, trague bastante agua y me faltaba la respiración…….GRACIAS SANDRA POR ESTAR AHÍ!
Otros dos compañeros tuvieron que ser ayudados pues estaban viendo en riesgo su salida del agua por los mismos motivos que yo y sumándole que la red atrapó a uno de ellos.
Cuando conseguimos salir del agua todo eran abrazos por poder respirar de nuevo desde la calma.
Aún así varios de los compis le echaron coraje e insistieron en el rescate de la red (un verdadero acto de valentía por su parte)
El día fue avanzando con muchísimas complicaciones pues el viento no cedía y eran rachas muy fuertes que impedían realizar las funciones con éxito.
Hoy por fín con la ayuda de todos los que continuábamos allí se ha recompuesto el campamento.
Se ha trabajado a plena potencia hora tras hora, minuto a minuto desde el día de ayer por salvaguardar la situación.
Es increíble como las personas pueden llegar a aunar sus fuerzas para salvar la vida de un delfín. Cada uno de los allí presentes aportamos nuestro granito de arena, todas las ideas eran validas, ninguna mas que otra, nadie mas que nadie, TODOS LUCHANDO POR UN MISMO FIN Y A CONTRARELOJ.
He aprendido muchísimo en este dia de la valía de las personas, personas que quizás algunas ni nos conocíamos como por ejemplo mi caso con SANDRA y ver como se arriesgo para que yo pudiese salir del agua y para que hoy pueda contar esto.
GRACIAS A TODOS LOS QUE AYER ESTUVISTEIS EN ESTE INFIERNO JUNTO CONMIGO pues yo tengo claro que ayer era mi destino estar allí con vosotros luchando por la causa que tantos meses PROMAR y los voluntarios llevamos luchando……..MARCOS NUESTRO DELFIN




3 comentarios:

  1. ¡Cinco meses! Vamos, que no es precisamente la aventura de un verano, el cuidar a un delfinito perdido.
    Definitivamente Marcos no tiene un ángel que le proteja, tiene un batallón de aguerridos ángeles a su alrededor.
    ¡Suerte! y gracias Iyuti por tus crónicas
    ¿esa es la sonrisa de Marcos?

    ResponderEliminar
  2. Sí, es la sonrisa de Marcos, la más bonita. A veces, a pesar de todo, no puede ser. Lo han dado todo, y ahora todos estos ángeles protectores tienen nuestro cariño.

    ResponderEliminar
  3. Mi cariño también lo tienen y mi admiración y respeto.

    ResponderEliminar